Por Baltasar Garzón, Presidente de Honor de FIBGAR
Hoy, mas que nunca, 75 años después de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (10/12/1948) debemos reivindicar la vigencia de la misma. Hoy, la violación sistemática de aquella es un hecho doloroso constatable en múltiples lugares del mundo, especialmente en Gaza, donde la degradación de la barbarie que se esta produciendo, ha hecho desaparecer cualquier justificación que pudiera haber existido ante la agresión primera.
Tenemos la obligación de denunciarlo y hacer todo lo que este en nuestra mano por avanzar en la defensa de los mas vulnerables, que, día a día, ven cercenados sus derechos mas elementales a una vida digna, y a la vida misma, humillados por las guerras, las persecuciones, las torturas, el terrorismo, las hambrunas propiciadas por la especulación sobre los alimentos, la pobreza extrema, alimentada por los mas espurios intereses económicos, los desastres climáticos por la acción humana y un negacionismo lacerante, la violencia machista contra la mujer y la discriminación ideológica, entre otros derechos.
Es el momento de la acción, eliminando la indiferencia ante el avance de políticas extremas que niegan o desprecian esos derechos, incluida el derecho a la memoria. Permanecer en silencio es ser cómplices de esos desmanes.
10/12/2023
