“Ese poeta acongojado en 1935, momento en el que se encontraba más cerca del dolor que de la inteligencia, más cerca de la sangre que de la tinta…”
Madrid, 21 de septiembre de 2018 – La Jornada Pablo Neruda 45 años después. Explico algunas cosas ha reunido en la mañana de hoy a más de 200 de personas en el Salón de Actos de la Facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), con un objetivo en común: debatir sobre la relación del poeta con la España Republicana y buscar la Verdad acerca de los acontecimientos que rodearon su muerte.
Organizada por la UCM y la Fundación Internacional Baltasar Garzón (FIBGAR), la jornada comenzaba con unas palabras de su presidente, Baltasar Garzón, quien destacaba la intensa relación que Neruda siempre tuvo con nuestro país. “La España que él había amado, la que se desangraba por una Guerra Civil” pero también la España que compartió con sus amigos de la Generación del 27 y la que nutrió tantos y tan bellos poemas y escritos, a los que España, Madrid, dieron vida. La noche de su muerte “Chile se veía inmerso en una larga noche negra”, recordaba Garzón. Y hoy, 45 años después, “organizamos este evento, enmarcado en el continuo trabajo de FIBGAR por la defensa de los DDHH, en un acto de memoria, la Memoria de una historia difícil, de la que Neruda también formó parte. Nos interesa la búsqueda de la Verdad. No hay que tener miedo a conocer la Verdad, lo contrario es garantizar la mentira y sobre la mentira las sociedades no se construyen, sino que se destruyen”.
A estas palabras se sumaba el rector de la Universidad, Carlos Andradas Heranz, quien describía a Neruda como una auténtica “referencia en España y nos concierne a todos involucrarnos en el conocimiento de la verdad”.
En la primera mesa, distintos profesionales como el historiador Mario Amorós y los abogados Rodolfo Reyes, Elisabeth Flores y Rodrigo Lledó, todos ellos estrechamente vinculados a la investigación en la muerte de Neruda, han intercambiado palabras y experiencias, recuerdos, sensaciones y opiniones sobre la muerte del poeta. “Aún no hay una causa oficial sobre su muerte”, recordaba Lledó, tras realizar un análisis de las distintas líneas de investigación que están en curso.
La estrecha relación de Neruda con la España Republicana
“Ese momento del poeta acongojado que escribía un poema en 1935, en el que se encontraba más cerca del dolor que de la inteligencia, más cerca de la sangre que de la tinta”. El poeta Niall Binns recordaba de esta forma el Neruda de nuestra Segunda República, a las puertas de la Guerra Civil, durante la segunda mesa de la jornada en la que distintas voces contaban esta la relación de Neruda con España.
Las profesoras e investigadoras Evangelina Soltero y Fanny Rubio, patrona también de la Fundación Internacional Baltasar Garzón, y el poeta Antonio Hernández, completaban esta mesa de historias y anécdotas, de poesía y prosa sobre una relación muy especial, la de Pablo Neruda con esa España Republicana que tanta vida le dio y también le arrebató. Sus palabras repasaban la vida del poeta en la madrileña Casa de las Flores, su presencia en todos los movimientos del grupo del 27, en la aventura del surrealismo, su involucración y forma de desvivirse por España.
La Jornada finalizó con una lectura de poemas del escritor y con las actuaciones musicales de Santiago Pineda y Leo Zelada, y la de Paco Ibáñez, en un salón de actos repleto de gente, de poesía, de historia y de vida. Porque tal y como indicaba el profesor José Manuel Lucía Mejías, “qué mejor homenaje a un poeta que hacer que su poesía siga siendo parte de nuestro recuerdo”.