FIBGAR celebra que no se recorten los derechos de las mujeres
Madrid, 24 de septiembre. El equipo de la Fundación internacional Baltasar Garzón (FIBGAR) celebra la decisión del Gobierno español de retirar de forma definitiva la propuesta de reforma de la Ley Orgánica de Protección del Concebido y los Derechos de la Embarazada, impulsada desde el Ministerio de Justicia. Se trataba de un texto que nunca debería haber sido propuesto ni desarrollado ya que limitaba las libertades de las ciudadanas, suponía un retroceso en la evolución del país e infravaloraba los derechos reproductivos y de decisión sobre su propio cuerpo de todas las mujeres.
Este nuevo texto, impulsado por el ya exministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón, no sólo consistía en dar un paso atrás y pasar de la ley de plazos actual a la de supuestos anteriores. Quería ir más allá impidiendo incluso cualquier posibilidad de interrupción del embarazo en algunos casos, incluso en contra del criterio médico.
La retirada de esta amenaza legislativa supone mantener los derechos adquiridos después de décadas de lucha por la mayor parte de la población española, algo que a priori no debería ser motivo de celebración. Pero se trata de una retirada gracias a la movilización social de mujeres y hombres que llevan dos años denunciando el grave impacto en la salud pública que tendría esta reforma. La vida de muchas mujeres se vería comprometida, arrojándolas a viajar fuera de nuestro país y a los abortos clandestinos para quienes carecen de recursos.
Las reformas sólo deberían servir para avanzar, para progresar. Así debería ocurrir también con la legislación sobre interrupción voluntaria del embarazo, despenalizándola por completo, garantizando la seguridad de personal sanitario y realizándolo siempre dentro de los márgenes de la Sanidad pública.